Contacto

"Vocación es un darse a Dios, con tal ansia, que hasta duelen las raíces del corazón al arrancarse" Beato "Lolo"







Me agradará enormemente compartir vuestras alegrías, pero mucho más lo hará el que podamos superar juntos las dificultades que se nos presenten en la que, sin duda, será la mayor aventura de nuestras vidas. Para ello podeis escribirme cada vez que lo deseeis a escalandolacima@gmail.com




martes, 16 de febrero de 2010

Saludos

Ya estoy aqui, ya estamos aquí. Queridos lectores y lectoras quiero saludaros a todos, sin dejar a uno solo. Desde donde quiera que esteis leyendo estas palabras quiero haceros saber el motivo que me lleva a escribir este diario.

"Diario de un joven con vocación religiosa"; este es el título escogido. Son muchos los años que llevo perdido en este mundo de la vocación religiosa, y no hago otra cosa que descolgar el teléfono cuando Dios me hace esa llamada, espero a ver qué dice y en seguida le cuelgo. ¿Cuántos de vosotros estáis como yo? Como me gustaría poder hablar con cada uno para sentir que no estamos solos en esto. Y es que lo principal es que tenemos a Cristo, es El, y solo El quien nos hace sentir estas cosas. Ojala, y Dios lo quiera, consigamos entre todos echarnos una mano.

Esta es una situación muy peligrosa, más de lo que creemos. Esta noche, Dios me ha inspirado para crear este blog porque ando perdido, andamos perdidos. ¡Qué bien y qué mal se pasa! ¿Cómo puede ser tan contradictoria la vocación: sé que lo daría todo por Cristo pero no tengo valentía para hacerlo, sea el motivo que sea, no hay valentía. Y es que creo que lo primero es asumir que "eso" que sentimos se llama Dios, que es completamente palpable en nuestro corazón. Me cabreo conmigo mismo muchas veces: sé que tengo mi felicidad (la mayor felicidad en este mundo) ahí, a la vuelta de la esquina y no puedo doblarla, no puedo, no puedo.

Dentro de unos días terminaré los exámenes de este primer cuatrimestre en la facultad de mi penultimo año de carrera, dentro de dos fines de semana iré a casa, al pueblo, a ver a la familia, la semana que viene comenzaré las clases otra vez, pasado mañana mi compañera de piso vuelve... Dentro de unos días la vida continuará exactamente igual que como hasta ahora; sin embardo, mi corazón, mi interior, mi alma seguirá entristeciendose, continuaré estando triste (aunque aparentemente alegre). No quiero seguir estando así chicos, no quiero. Y mucho menos debo: "ESTAD ALEGRES". ¿Cómo puedo estar triste teniendo a Dios tan cerca? ¿Cómo cada día que pasa me siento más vacío? ¿Por qué cuánto más consigo, más infeliz me siento? Ay Dios mío, que algo no anda bien.

Hermanos y hermanas, no voy a permitir que en mi corazón no reine la alegría que nos da Dios. Y espero contar con todos vosotros en este viaje tan emocionante. Y si la Virgen nos ayuda, llegaremos a estar "en Dios". Muchas son las preguntas, pero tenemos una gran certeza: Dios nos espera y nos ama eternamente. Hoy es el día de decir: HASTA AQUÍ, YA BASTA.

Muchas gracias a todos por escucharme. Os encomiendo a Jesús. Saludos hermanos.

1 comentario:

  1. Te ofrezco mi mano, mi experiencia y mis oraciones. Sé de lo que hablas porque he estado en ese punto, aunque ahora voy doblando ya la esquina, gracias a Dios. Tu blog y el mío han de ser primos, por lo menos. Te invito a visitarme, quién sabe y algo de lo que hay en mi diario pueda ayudarte. Dios haga brillar su luz sobre ti.

    ResponderEliminar